La figura de Antonio Machado, protagonista cotidiano e inseparable de la vida de la ciudad, ha incrementado su presencia este fin de semana coincidiendo con el 75 aniversario de su muerte y el 25 aniversario de la declaración de su obra como valor universal por la UNESCO en un evento organizado por la Fundación Antonio Machado. El presidente del Congreso, Jesús Posada, ha presidido este acto en el salón de Plenos del Ayuntamiento en la que también ha participado el alcalde Carlos Martínez y el presidente de la Fundación Antonio Machado en España, Manuel Núñez Encabo, entidad organizadora del evento. Durante este homenaje se hizo, como explicó el concejal de Cultura, Jesús Bárez, “una lectura conmemorativa de ese 25 aniversario del reconocimiento de la obra de Machado de una institución internacional y de gran prestigio como es la UNESCO y, en cierta medida, podemos decir que casi es un premio ‘nobel’ de Humanismo. Para quienes seguimos participando del espíritu de Machado es algo que, realmente, nos enorgullece”.

Posteriormente, se proyectó, con dos sesiones, en la fachada de la iglesia de La Mayor, escenario de la boda de Machado y Leonor Izquierdo, un audiovisual elaborado por Lucas Caraba y Lola Gómez Redondo con 75 voces leyendo a Machado. “Esta creación incluye la lectura de la obra del poeta con los textos proyectados, diseñados con una tipografía acorde a los mismos y con la voz de personas de todas las edades recitando sus versos y acompañados de música compuesta para la ocasión”, ha explicado el concejal.

Jesús Bárez definió “este acto como un homenaje de los vecinos y vecinas de Soria a Machado, los lectores de este proyecto son sorianos de la calle, niños de Primaria hasta mayores… De algún modo representan la implicación de la gente del pueblo con la poesía machadiana, son ellos los depositarios de su legado y también en muchos casos fueron su inspiración”.

Además de estos eventos del viernes, la ciudad también recordó a Machado con presencia en su tumba en la ciudad francesa de Colliure, donde reposa, y en la tumba de Leonor, en el cementerio soriano del Espino. Muchos sorianos también realizaron su particular homenaje caminando por ellos mismos senderos y paisajes que inspiraron al autor de 'Campos de Castilla'.